Para enseñar literatura primero hay que matarla – La piedra de Sísifo

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Vamos a dejarnos de romanticismos. Enseñar literatura no parece que sea romper las páginas de un mediocre libro de texto, ni subirse a la mesa de un aula a gritar «¡Oh capitán, mi capitán!». La mayoría de las veces Walt …

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La creatividad es “pariente” de la locura | Revista Merca2.0

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Un estudio realizado en el Instituto Karolinska, en Suecia, reveló una relación entre la creatividad y la demencia. El estudio estuvo a cargo de Simon Kyaga, epidemiólogo del instituto y descubrió que las personas que eligen …

Rossana Migliónico Molina‘s insight:

Lo dicen los científicos

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La creatividad, como las bicicletas, es para el verano

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Se suele decir que el pensamiento creativo brota con más facilidad en estados de relajación. Hay muchos testimonios de artistas, pensadores, inventores o investigadores que han resuelto sus problemas o encontrado soluciones creativas a sus retos durante el sueño, a lo largo de una tranquila caminata o durante un período de descanso. Y, vaya, casualmente los docentes estamos a punto de disfrutar de un merecido tiempo de descanso: ¿se te ocurrirá alguna buena idea durante las vacaciones? En EducaconTIC queremos ayudarte: si no te apetece este verano elde-teching, aquí te proporcionamos algunos temas de reflexión para el próximo curso.

Rossana Migliónico Molina‘s insight:

Se me ocurren varias cosas en el verano y me entra la ansiedad de que empiecen los cursos para aplicarlas 

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Creatividad con propósito: el caso Dove y el caso Coca Cola – Semana Económica

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Creatividad con propósito: el caso Dove y el caso Coca Cola Semana Económica En el post anterior hablé sobre las cosas que las personas valoran, y que muchas veces no pasan por los productos o las marcas en sí, sino que son mucho más fundamentales…

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Dialogando con il Dante

Representé el Paraíso entre nubes, predominando, en la altura, una luz que va adquiriendo claridad cada vez que se aproxima alguien, y que al observarla, se transforma en un ave. Una mujer regala rosas, símbolos de renacer, belleza y perfección. El ángel cayendo, significa la justicia, porque no aprovechó para estar en el Paraíso. Los que caen son atrapados y arrastrados por enredaderas cuyas hojas están muertas y son lo opuesto a las rosas (la perdición) hacia otro lugar oscuro, donde estar inmóvil es lo único que se puede hacer. La mujer en la oscuridad está atada con enredaderas, impidiendo que se mueva pero las espinas lastiman su cuerpo: ese lugar es el Infierno. LAURA FERRARI

El trabajo en clase con la obra magna de Dante Alighieri da lugar a que muchos adolescentes se interroguen respecto de qué puede pasar más allá de la muerte.
En este caso, los estudiantes de 5to año o segundo de Bachillerato de orientación Artística, recibieron de mi parte la consigna de expresar, en la disciplina que desearan, una visión respecto de cómo será el mundo de ultratumba. Luego, lo debían presentar frente al grupo, analizar su creación y finalmente comparar, basándose en citas textuales, con lo que habían estudiado de «La divina comedia».
Y este fue el resultado:

Elegí diseñar ropa. A la izquierda, el diseño del infierno es un vestido muy ajustado, cuello alto, mangas largas con puños, como forma de expresar la falta de libertad de movimiento. Del mismo modo, la pollera bien larga es debida a la prohibición de un derecho, igual que el pelo recogido. Los zapatos son bajos, en señal de estar en dimensiones inferiores, y el color negro, incluso con sombra detrás, refleja lo oscuro, sufrido y triste del lugar. La otra posibilidad que el ser humano puede encontrar después de la muerte es el Purgatorio, representado con un vestido amplio en la parte inferior, que da libertad y movilidad a quien lo lleva. El cuello también es alto, pero en éste modelo está abierto, debido a que al Purgatorio toda la gente llega con pecados, pero algún día su espíritu será limpiado. Los zapatos altos le dan superioridad espiritual en relación al Infierno. El fondo del vestido es blanco por la pureza y el brote de enredaderas de la falda es justamente el renacer de la esperanza. VALENTINA TEXEIRA

Con las fotos que elegí, representé mi idea: una persona, cuando muere, si no ha cumplido todos los propósitos por los que llegó a la Tierra, volverá a nacer una y otra vez hasta cumplir todos. En cada vida, pagará lo malo que haya hecho en sus vidas anteriores. Por eso en la foto de la izquierda hay un recién nacido, seguido por todas las vidas que tendrá. Una vez que todas sus metas se hayan cumplido, ingresará a lo que Dante llama "Paraíso", y que representé con la foto de la derecha, donde se entra hacia la luz. SOFÍA MALGOR

Con las fotos que elegí, representé mi idea: una persona, cuando muere, si no ha cumplido todos los propósitos por los que llegó a la Tierra, volverá a nacer una y otra vez hasta cumplir todos. En cada vida, pagará lo malo que haya hecho en sus vidas anteriores. Por eso en la foto de la izquierda hay un recién nacido, seguido por todas las vidas que tendrá. Una vez que todas sus metas se hayan cumplido, ingresará a lo que Dante llama "Paraíso", y que representé con la foto de la derecha, donde se entra hacia la luz. SOFÍA MALGOR

En este collage represento al Infierno, en el cual predomina la oscuridad, excepto en algunas partes donde los condenados arden en llamas. Están aquí las personas que han hecho mucho daño, y excepto por el fuego, todo lo que hay son torturas psicológicas porque pienso que no hay peor castigo que vivir envidioso, sentir dolor espiritual, soledad y vacío. Junto con guerras y armas está el dinero, porque hace que las personas se transformen y cambien su forma de ser y de pensar. Hay un ojo llorando sangre que representa el dolor del alma. Es un lugar sin arte. FLORENCIA MACEDO

El Paraíso es un lugar cálido, donde predomina el color, la naturaleza, la música, el amor, la diversión, la alegría y la tranquilidad. Es un lugar con arte. La gente no se ve entre sí porque va sólo el alma, pero se siente la presencia de los otros por el amor. No hice Purgatorio porque no creo que haya. La gente en su vida hace bien y mal, pero si se arrepiente del mal y lo remedia, se salva. Cada uno decide dónde quiere estar. FLORENCIA MACEDO

Después de la muerte no hay un dios, sino un lugar en blanco. La gente va construyendo con su mente lo que va a encontrar más allá, y qué castigo o qué premio recibirá. Dante se basaba en temas de la Antigüedad y yo tomé el círculo como símbolo de lo perfecto. Pero no es un círculo completo, porque lo humano no es perfecto. Las formas laterales son ideas de lo que cada uno fue creando en su mente que encontraría en el más allá, y cada idea tiene proyecciones. Lo que Dante escribió también fue una idea y por lo tanto el más allá de Dante también estaría aquí en alguna forma, con sus proyecciones. Hay una infinidad de reinos, cada uno, al morir, empieza a transitar por aquí y reconoce su puerta. Pero ningún lugar es eterno: una vez que se purifiquen, las almas regresan a la Tierra. IGNACIO RIVERO

La imagen central es una calavera, especie de diablo, que hice a partir de una historia que en la infancia mi madre me contaba y que dice que el diablo es una calavera loca, que cuando una persona hace algo malo o que produce mucho daño, cuando llega su muerte, la calavera loca lo va a buscar y lo tira de los pies arrastrándolo a un lugar donde pagará por toda la eternidad el daño causado. En ese lugar hay llamas y espinas, murciélagos y tumbas que tienen que cargar los condenados. DARÍO VILLARREAL

Luego hice el Paraíso. No incluí Purgatorio porque para mí el Purgatorio no está después de la muerte sino que el Purgatorio es éste: es la vida. Para ilustrar el Paraíso me basé en el principio de que es un lugar de luz, y como en el Canto XXXIII ("Paraíso") de la obra de Dante habla de una mujer (María), hice a esta mujer con alas, lo que la hace superior, no es como una mujer común, sino elevada. DARÍO VILLARREAL

Viñeta 1: Llega el momento de la muerte, que será una etapa de reflexión para el alma.

Viñeta 2: Cada uno piensa sobre lo hecho en vida y elige cuál camino le corresponde tomar, entre varios posibles.

Viñeta 3: A medida que se recorre ese camino, se olvida toda la vida anterior, y al finalizarlo, se reencarna en otra vida que está por surgir. MELISA BRITOS

Educación y vida: Steve Jobs dejó su legado

Este discurso fue dicho por el creador de muchos de los productos tecnológicos que nos han reformulado la vida. Falleció hace dos días, por cáncer de páncreas. Nació de una madre que tenía previsto darlo en adopción, pero fue rechazado por quienes lo iban a adoptar porque no era niña. Luego, sus promitentes padres tuvieron que jurar que lo mandarían a la Universidad para poder recibirlo en su familia. Pero él fue apenas 6 meses a la misma porque no tenía esa convicción y exigía ingentes sacrificios económicos a sus padres. Pasó por muchas pruebas en la vida, y su lección final es que hay que amar lo que se hace, porque es el único camino para ser felices.

Por mi culpa, por mi culpa…

El fracaso de los modelos que la sociedad se ha dado no puede evitar tener un chivo expiatorio y cargar las tintas a los educadores es ya un cliché en todas partes del mundo. Se pretende que el educador no solamente enseñe, no solamente fomente valores, no solamente dé herramientas para crecer individual y socialmente, sino que sea desde psicólogo a niñera, y, eso sí: si no cumple eficientemente con toda su gama de roles, enseguida asuma, además, la calidad de CULPABLE.

He aquí un artículo interesante para analizar este tema, escrito por José María García Linares:

Leer el artículo

Lecciones magistrales… ¿o no?

Según circula por internet, fueron lecciones de Bill Gates. Pero, en realidad, no son de su autoría estas lecciones, sino del educador estadounidense Charles Sykes, quien inicialmente lo publicó en un diario de California.

Ahora bien: yendo al contenido, vale la pena compartirlo, y sobre todo que cada uno diga qué piensa al respecto…

BillGatesDiceALosAdolescentes12

Carpe diem

En este video, que repasa una de las escenas clave de la película «La sociedad de los poetas muertos», protagonizada por Robin Williams, tienes la esencia de lo que comprende el pensamiento de Horacio, cuando expresa a su amiga Leucónoe (en la oda a ella dedicada), que no se preocupe por conocer el futuro, sino que aproveche el día:

Relájate y crea

El potencial creativo de cada persona, cualquiera sea, puede ser acrecentado, sin techo, a través de una serie de técnicas. Existe, eso sí, una cierta inhibición a la hora de animarse a crear, a generar, a proponer. Tenemos temor al ridículo, a equivocarnos, a ser rechazados por nuestras ideas, o quizá hasta etiquetados de algún modo que nos disguste.

No obstante, trabajando de una manera consecuente, nuestra faceta creativa crecerá y estaremos satisfechos de los cambios que podemos hacer en nuestra propia vida y los aportes que llegaremos a incorporar en nuestro trabajo, o los nuevos trabajos que seremos capaces de encarar a partir de ella.

Hay un sitio en internet por excelencia para aprender y ejercitar la creatividad y es http://www.neuronilla.com. Pero también te recomiendo, una vez que vayas a ponerte en función de esta tarea, que te entregues a este video: vale la pena.

Poesía en rap

He aquí dos buenísimas letras de rap, cada una con su correspondiente audio, útiles como entretenimiento, sí, pero también buenísimas para estudiar en varias asignaturas: lengua, sociología, psicología, filosofía, educación ciudadana, historia.

Por favor, hazte un minuto y escúchalas:

letra y audio de «El final del cuento de hadas» (violencia doméstica)

letra y audio de «Mil vidas» (canto a la vida y sus mil posibilidades, en cada historia humana)

Aprender es hermoso y lleva la vida entera (Dolina)

La velocidad nos ayuda a apurar los tragos amargos. Pero esto no significa que siempre debamos ser veloces. En los buenos momentos de la vida, más bien conviene demorarse. Tal parece que para vivir sabiamente hay que tener más de una velocidad. Premura en lo que molesta, lentitud en lo que es placentero. Entre las cosas que parecen acelerarse figura -inexplicablemente- la adquisición de conocimientos.

En los últimos años han aparecido en nuestro medio numerosos institutos y  establecimientos que enseñan cosas con toda rapidez: «….haga el bachillerato en  6 meses, vuélvase perito mercantil en 3 semanas, avívese de golpe en 5 días, alcance el doctorado en 10 minutos…..»

Quizá se supriman algunos… detalles. ¿Qué detalles? Desconfío. Yo he pasado 7 años de mi vida en la escuela primaria, 5 en el colegio secundario y 4 en la universidad. Y a pesar de que he malgastado algunas horas tirando tinteros al aire, fumando en el baño o haciendo rimas chuscas.
Y no creo que ningún genio recorra en un ratito el camino que a mí me llevó decenios.

¿Por qué florecen estos apurones educativos? Quizá por el ansia de recompensa inmediata que tiene la gente. A nadie le gusta esperar. Todos quieren cosechar, aún sin haber sembrado. Es una lamentable característica que viene acompañando a los hombres desde hace milenios.

A causa de este sentimiento algunos se hacen chorros. Otros abandonan la ingeniería para levantar quiniela. Otros se resisten a leer las historietas que continúan en el próximo número. Por esta misma ansiedad es que tienen éxito las novelas cortas, los teleteatros unitarios, los copetines al paso, las «señoritas livianas», los concursos de cantores, los libros condensados, las máquinas de tejer, las licuadoras y en general, todo aquello que no ahorre la espera y nos permita recibir mucho entregando poco.

Todos nosotros habremos conocido un número prodigioso de sujetos que quisieran ser ingenieros, pero no soportan las funciones trigonométricas. O que se mueren por tocar la guitarra, pero no están dispuestos a perder un segundo en el solfeo. O que le hubiera encantado leer a Dostoievsky, pero les parecen muy extensos sus libros.
Lo que en realidad quieren estos sujetos es disfrutar de los beneficios de cada una de esas actividades, sin pagar nada a cambio.

Quieren el prestigio y la guita que ganan los ingenieros, sin pasar por las fatigas del estudio. Quieren sorprender a sus amigos tocando «Desde el Alma» sin conocer la escala de si menor. Quieren darse aires de conocedores de literatura rusa sin haber abierto jamás un libro.

Tales actitudes no deben ser alentadas, me parece. Y sin embargo eso es precisamente lo que hacen los anuncios de los cursos acelerados de cualquier cosa.
Emprenda una carrera corta. Triunfe rápidamente.

Gane mucho «vento» sin esfuerzo ninguno.

No me gusta. No me gusta que se fomente el deseo de obtener mucho entregando poco. Y menos me gusta que se deje caer la idea de que el conocimiento es algo tedioso y poco deseable.
¡No señores: aprender es hermoso y lleva la vida entera!

El que verdaderamente tiene vocación de guitarrista jamás preguntará en cuanto tiempo alcanzará a acompañar la zamba de Vargas. «Nunca termina uno de aprender» reza un viejo y amable lugar común. Y es cierto, caballeros, es cierto.

Los cursos que no se dictan:  Aquí conviene puntualizar algunas excepciones. No todas las disciplinas son de aprendizaje grato, y en alguna de ellas valdría la pena una aceleración. Hay cosas que deberían aprenderse en un instante. El olvido, sin ir más lejos. He conocido señores que han penado durante largos años tratando de olvidar a damas de poca monta (es un decir). Y he visto a muchos doctos varones darse a la bebida por culpa de señoritas que no valían ni el precio del primer Campari. Para esta gente sería bueno dictar cursos de olvido. «Olvide hoy, pague mañana». Así terminaríamos con tanta canalla inolvidable que anda dando vueltas por el alma de la buena gente.

Otro curso muy indicado sería el de humildad. Habitualmente se necesitan largas décadas de desengaños, frustraciones y fracasos para que un señor soberbio entienda que no es tan pícaro como él supone. Todos -el soberbio y sus víctimas- podrían ahorrarse centenares de episodios insoportables con un buen sistema de humillación instantánea.
Hay -además- cursos acelerados que tienen una efectividad probada a lo largo de los siglos. Tal es el caso de los «sistemas para enseñar lo que es bueno», «a respetar, quién es uno», etc.
Todos estos cursos comienzan con la frase «Yo te voy a enseñar» y terminan con un castañazo. Son rápidos, efectivos y terminantes.

Elogio de la ignorancia: Las carreras cortas y los cursillos que hemos venido denostando a lo largo de este opúsculo tienen su utilidad, no lo niego. Todos sabemos que hay muchos que han perdido el tren de la ilustración y no por negligencia. Todos tienen derecho a recuperar el tiempo perdido. Y la ignorancia es demasiado castigo para quienes tenían que laburar mientras uno estudiaba.
Pero los otros, los buscadores de éxito fácil y rápido, no merecen la preocupación de nadie. Todo tiene su costo y el que no quiere afrontarlo es un garronero de la vida.
De manera que aquel que no se sienta con ánimo de vivir la maravillosa aventura de aprender, es mejor que no aprenda.

Yo propongo a todos los amantes sinceros del conocimiento el establecimiento de cursos prolongadísimos, con anuncios en todos los periódicos y en las estaciones del subterráneo.

«Aprenda a tocar la flauta en 100 años».
«Aprenda a vivir durante toda la vida».
«Aprenda. No le prometemos nada, ni el éxito, ni la felicidad, ni el dinero. Ni siquiera la sabiduría. Tan solo los deliciosos sobresaltos del aprendizaje».

ALEJANDRO DOLINA