«La cabeza en barbecho» es el título original de esta película francesa, conocida en español como «Mis tardes con Margueritte».
Una mente que no accede a la lectura, tiene retaceado el crecimiento de muchas más facetas que la intelectual: todo un ser queda en barbecho, esperando ser sembrado para dar frutos.
He aquí el vínculo, pues nada más elocuente se pueda agregar con palabras a esta obra maestra del cine: